Me gusta que me griten, te estarás preguntando ¿Por qué?, no es masoquismo, así que te invito a que leas hasta el final, para que me puedas entender y tal vez te animes a practicar esta maravillosa experiencia.
Tenemos tanta influencia del medio en el que nos desenvolvemos que sin darnos cuenta comenzamos a introyectar en nuestros patrones de conducta ciertas características de personalidad de los seres que nos rodean, y en general sucede a través de las personas mas cercanas con las que pasamos más tiempo, como lo son nuestros padres, abuelos, hermanos, cuidadores, entre otros. Y tiende a darse cuando los percibimos como nuestros modelos a seguir, ya sea de manera consciente e inconsciente.
Con toda la información que recibimos del entorno en el que nos encontramos se va moldeando nuestro carácter y lo vamos dando a conocer a otras personas con las que nos relacionamos, y en algunos casos se genera una percepción adecuada de nosotros y en otras ocasiones es errada y se aleja de lo que realmente somos.
Por lo expresado anteriormente te invito a que hagas un análisis de tu personalidad y revises la forma en la que interactúas con los demás, para que tengas claro si estás satisfecho o no con lo que percibes de ti, en caso de que no lo estés, haz una lista de las cinco personas más influyentes en tu vida y con los que interactúas, observa su comportamiento y escoge lo mejor de ellos, para que poco a poco vayas incorporándolos a tu conducta, y en caso de que no logres percibir características positivas o las no deseadas estén tan arraigadas en ti que no sabes cómo trabajarlas, adáptalas de tal manera que se conviertan en lo que esperas, como se refleja en la siguiente situación.
Magda creció en un ambiente bullicioso en donde gritar a los demás cuando había un desacuerdo era visto como algo natural, cuando tomó conciencia que no era lo ideal, se enfadaba, sin embargo, terminó adaptándose a este hasta tal punto que lo incorporó dentro de sus características de personalidad, y aunque con el tiempo se fue formando y adquiriendo conocimientos desde diferentes disciplinas, aún permanecía en ella ese rasgo.
Aunque a nivel laboral y en sus relaciones con los demás, fuera del entorno familiar, nunca les dio a conocer esta parte de ella, siempre ha permanecido y se dio cuenta al momento de educar a sus hijos, sobre todo cuando la desobedecen. Tenía claro que no estaba haciendo lo correcto porque notaba que su tono de voz iba en aumento cuando les llamaba la atención por algún comportamiento no deseado y al poco tiempo observó que los niños la estaban imitando, así que decidió darle un giro diferente.
Ahora es más consciente a la hora de corregir una acción inadecuada, en sus hijos, les habla con firmeza y a la vez utilizando un tono de voz adecuado para la situación, sin necesidad de alterarse, ni complicar más el evento que está sucediendo y aunque aún sigue gritando dirigió toda su energía hacia una acción positiva, ahora les grita con más frecuencia, pero les grita que los ama y se los dice con nombre propio y sin darse cuenta sus hijos y su pareja han vuelto un hábito esta acción, y en cualquier momento le gritan que la aman y a ella le encanta que la griten.
Como pueden analizar no ha dejado de gritar, solo que ahora su energía al alzar la voz está dirigida de manera positiva, es por ello, que hoy la invitación es que redirecciones aquellas conductas que no te están conduciendo al logro de tus objetivos y por lo tanto no hay satisfacción personal. No es un proceso sencillo, pero siendo consciente de la situación y trabajando en función de ello, con el apoyo de otros, puedes lograrlo. Te comparto unos tips que pueden ser de ayuda para este proceso.
TIPS
- Haz una lista de tus virtudes y aspectos a mejorar, tratando en lo posible de no dejar ninguno por fuera.
- Pregunta a la persona más cercana, la que mejor te conozca, ¿Cuál es la percepción que tiene de ti? Tal vez te ayude a completar la lista, si no sientes comodidad en hacerlo omítelo.
- Al tener claridad sobre tus características de personalidad, elige aquella que deseas mejorar por encima de todas.
- Piensa en cómo puedes darle un giro positivo para tu beneficio y el de otros, entre más opciones mejor.
- Apóyate en tus virtudes o la experiencia de otros, ya sea preguntándoles directamente o leyendo sus escritos.
- Cuando hayas mejorado una actitud que no era de tu agrado, estás lista para continuar con la siguiente de la lista de aspectos a mejorar.
“Solo depende de ti el cambio que le des a tu vida”
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